Canal 54
El premio de la montaña fue para Clément Alleno del Burgos BH
Caleb Ewan se ha llevado la victoria al esprint en la Clásica a Castilla y León, que ha discurrido este caluroso martes entreValladolid y La Cistérniga. El australiano del equipo Team Jayco AlUla se ha alzado con la victoria al esprint en la meta de la localidad vallisoletana.
El ciclista ha sido el más rapido en la meta, por delante de Davide Cimolai (Movistar) y de Jenthe Biermans (Arkéa-B&B Hotels), logrando su segundo triunfo este 2024, tras el logrado en el Tour de Omán.
La carrera ha estado marcada por una fuga desde el kilómetro 3, con siete protagonistas, Clément Alleno (Burgos BH), Joao Mendes (Victoria Sports), Unai Cuadrado y Nicolás Alustiza (Euskaltel), Edgar Curto (Illes Balears), Stiven Vargas (Colombia) y Carlos García (Kern Pharma). Vargas ha sido el primero en ser cazado por el pelotón, controlado por el Astaná.
Los altos han ido haciendo mella en los fugados, quedándose soloCarlos García Pierna, el día que cumplía 25 años, siendo cazado a 15 kilómetros del final, en un repecho en la zona del valle de Esgueva.
De ahí a meta, mucha velocidad en el pelotón, con el Lotto y el Movistar evitando cualquier intento de fuga, y el TotalEnergiesbuscando colocarse. Al final ha sido Ewan, ganador de tres etapas del Tour de Francia en 2019 y dos más en el de 2020; cinco del Giro y una en la Vuelta a España, el que se ha llevado el triunfo.
El premio de la montaña fue para el ciclista francés del Burgos BH Clément Alleno, que vió así la carrwra, «la fuga se formó muy rápido, en el kilómetro cero de la carrera. Los siete corredores nos entendimos bien en los relevos. En la primera subida solo pude ser tercero, pero pude analizar al resto de rivales y sentí que era el más rápido del grupo. En la segunda, me puse a rueda de Alustiza, que había ganado antes, y lo superé para llevarme los puntos. En la tercera, que era adoquinada, peleé con García Pierna y gané de nuevo. Después nos quedamos cuatro corredores en cabeza y pude ganar también el cuarto sprint de montaña, asegurando este premio. En la última subida, iba con Carlos García Pierna y le dije que podía irse en solitario si quería, ya que yo intentaría terminar tranquilo la carrera y guardar fuerzas para la Clásica de Ordizia del jueves. Cuando el pelotón me cogió, intenté ayudar al equipo y llevarles un poco de agua a los compañeros. Desde el año pasado no corría con tanto calor. Hay que beber mucho y echarse agua en la cabeza, las piernas y el resto del cuerpo cada diez minutos para mantenerse hidratado. Fue un día duro, pero estoy muy contento con las sensaciones. Para el equipo es una carrera importante, ya que corremos cerca de Burgos, y tener un ciclista delante peleando por la montaña es algo positivo. Ahora toca recuperar y, en Ordizia, creo que podré hacer una buena carrera”.